Durante la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso, la portavoz socialista, Soraya Rodríguez, reprochaba a la vicepresidenta que en la rueda del Consejo de Ministros del pasado viernes usara "datos falsos para colocar junto a la palabra 'parado' la palabra 'defraudador', para criminalizarles", y le exigía que "tras cinco días de esta ignominia", rectificara sus declaraciones y se disculpara.
No lo ha hecho puesto que ni ha admitido explícitamente el error en sus declaraciones ni tampoco se ha disculpado.
"Este Gobierno no acusa, cumple y hace cumplir la ley", le ha replicado Sáenz de Santamaría, afirmando que el que los socialistas hablen de fraude laboral es "una imprudencia, una osadía y una temeridad", dado que el Ejecutivo "únicamente ha hecho públicas las cifras de sanciones".