El presidente, Carlos García, ha agradecido el trabajo del Área de Familia en este tema tan relevante, “un ejemplo de que la Diputación y todos los grupos políticos que están representados en ella trabajan por hacer la vida más fácil a los abulenses, en este caso acentuada cuando nos referimos a los colectivos más vulnerables”. Sobre el Plan de Drogas, García ha especificado que, además de la prevención, “hay objetivos intermedios como la rehabilitación y la integración de las personas que en un momento dado cayeron en el mundo nocivo de las drogas, pero que luchan por salir de él”.
Por su parte, Beatriz Díaz ha señalado que esa sensibilización, “a través de diferentes campañas, debe dirigirse a la población que está más necesitada de esa información, que es la de edades escolares y la juventud, pero también a los padres de niños y jóvenes”. Por tanto, los diferentes programas con contempla el Plan, tratan de conseguir la implicación de la comunidad educativa y de las familias.
Otro de los objetivos del Plan es la colaboración entre las diferentes administraciones. Desde la Diputación “intentamos hacerlo con la comunidad sanitaria, la educativa y con asociaciones que nos prestan a sus educadores y monitores juveniles para poder educar a los jóvenes en ocios alternativos y evitar que consuman drogas y alcohol”. Ayuntamientos y autoescuelas también son objetivo de este Plan, especialmente para prevenir el consumo de alcohol y el peligro que supone para la conducción.
Los ayuntamientos de la provincia, en virtud del Plan, disponen de un técnico de la Diputación que coordina las actividades y, junto con los CEAS, actuar ante cualquier caso de consumo o adicción que surja en cualquier ámbito de la provincia.
Los últimos datos que se manejan desde el Área de Familia hablan que desde el último trimestre de 2018 hasta ahora, en el marco del Plan Provincial sobre Drogas se ha atendido a 32 usuarios, once de ellos menores de edad por problemas de consumo de cannabis; y 21 adultos, de los cuales diez tenían problemas de alcohol, seis por problemas de cannabis, tres por problemas de alcohol y cannabis y dos por un problema de drogas sin sustancia (nuevas tecnologías y ludopatía).