Esto que escribo hoy es en referencia a tanto bombo y platillo a una persona que ya tenía su edad y que, lógicamente, como todo ser mortal y humano, tendemos a deteriorarnos física y psicológicamente y, finalmente, como a todos, nos llega la muerte aunque estés rodeado de oro y plata.
Llama la atención sospechosa de los medios cuando se refieren a alguien que consideran de rendirle pleitesía cuando en cinco minutos del tiempo occidental mueren miles o más de enfermedades propias de la miseria o hambre y ninguna referencia a sus "nombres", ya que para ellos son anónimos porque no han ostentado cargo alguno de lo que ellos consideran su "estatus".
Estos medios siguen contribuyendo a una auténtica falta de respeto por su parte al no colaborar con una sociedad humana global que aspira y va en una dirección constructiva de la que todos somos uno y no hay nadie por encima de nadie.
Así que estas "ceremonias" de alta alcurnia ya mucha gente sabe que no van a ninguna parte pero hay elementos de este sistema que las siguen sosteniendo porque, no sabemos, pero ahí siguen dándole coba.