Pedro Sánchez ha dado un paso al frente. Lo ha hecho en una comparecencia sin preguntas este mismo lunes, desde el Palacio de la Moncloa, donde sorprendió a todos al anunciar la celebración de un Consejo de Ministros extraordinario esta misma tarde con el propósito de convocar formalmente la fecha de los comicios generales.
Incluso algunos ministros se han mostrado estupefactos ante la noticia, ya que la intención del presidente del PSOE siempre ha sido agotar la legislatura en coalición con UP para poder iniciar la presidencia europea el próximo 1 de julio.
El propio Sánchez ha descubierto que, a primera hora de la mañana, mantuvo un despacho con el rey Felipe VI al que le informó de su decisión de disolver las Cortes Generales de forma inmediata y adelantar las elecciones.
Considera que, tras los resultados de los comicios autonómicos y municipales de este 28-M, en los que el PP ha arrebatado a su fomración seis comunidades autónomas, la "mejor salida" es "dar la palabra a los españoles para que expresen en las urnas su voluntad".
La convocatoria formal aparecerá publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), lo que quiere decir que los comicios se celebrarán el domingo 23 de julio, de acuerdo con los plazos que establece la ley (53 días desde la publicación de la disolución de las Cortes).
“A la vista de los resultado de las elecciones celebradas ayer”, la “primera consecuencia” es que “magníficos presidentes y alcaldes socialistas se van a ver desplazados” pese a una “gestión impecable” y a pesar de que “muchos han visto incrementado su apoyo” y, como segunda consecuencia, que “numerosos instituciones pasarán a ser administradas” por coaliciones del PP con la 'ultraderecha' de Vox.
“Aunque las votaciones de ayer tenían un alcance municipal y autonómico”, ha admitido que el “sentido del voto traslada un mensaje que va más allá” y, por tanto, como “presidente del Gobierno y como secretario general del PSOE” asume “en primera persona los resultados” y considera “necesario dar respuesta y someter nuestro mandato democrático a la voluntad popular”.
“España está a punto de superar una etapa de crisis derivada de la emergencia de la covid-19 y también de la guerra de Ucrania, encaramos una senda clara de crecimiento, de creación de empleo, y de cohesión social y, a estas alturas de la legislatura, el Gobierno ha sacado adelante las grandes reformas comprometidas en el discurso de investidura, en el programa de Gobierno y en el acuerdo con la Comisión Europea”, recuerda, a la par que hace hincapié en que España se dispone a desempeñar “una responsabilidad muy importante en este contexto geopolítico” que está viviendo Europa: la Presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea.
“Todas estas razones creo aconsejan una clarificación sobre la voluntad de los españoles, una clarificación sobre las políticas que debe aplicar el Gobierno de la nación y una clarificación sobre las fuerzas políticas que deben liderar esta fase”, y para ello, concluyó, “solo hay un método infalible para solventar estas dudas, ese método es la democracia y, por consiguiente, creo que lo mejor es que los españoles tomen palabra y se pronuncien sin demora para definir el rumbo político del país”.