Durante su intervención en el Pleno en el que Sánchez pide la autorización del Congreso para extender otros 15 días el estado de alarma, Casado mantuvo una actitud crítica con el presidente del Gobierno a cuenta de su gestión en la lucha contra la pandemia del Covid-19 en España, recordándole sus críticas al Ejecutivo de Mariano Rajoy con el ébola.
En esta situación que vive España, el presidente de los populares y líder de la oposición exigió “un gobierno que no nos mienta” y “diga siempre la verdad”, recordando así las míticas palabras que el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba dedicó al Gobierno del popular José María Aznar en el atentado del 11-M.
“Su autoridad moral para pedir ahora lealtad y unidad es nula pero, aun así, nosotros mantendremos hoy el apoyo a las medidas de contención de la pandemia”, subrayó Casado, asegurando así que la guía de la vocación política del PP es “la ética de la responsabilidad”. “Le recomiendo que la practique alguna vez usted también”, espetó a Sánchez.
"ASÍ NO"
Tras una retahíla de críticas a las medidas económicas impulsadas por el Ejecutivo, Casado recordó que en la primera votación del estado de alarma hace un mes dijo a Sánchez “que no estaba solo” y que en la segunda autorización ya vaticinó “que esto no iba bien”. “Así no”, añadió en esta tercera ocasión en la que Sánchez pide al Congreso una nueva extensión del estado de alarma, hasta el 25 de abril.
Ante el “terrible drama nacional” que experimenta España, siendo “el país del mundo con más fallecidos por millón de habitantes” a causa del Covid-19, volvió a reclamar que el Gobierno deje de hablar “sólo de picos y de curvas” para “no convertir en mera estadística a las decenas de miles de vidas truncadas y de duelos en soledad”.
“Las víctimas merecen visibilidad pública y el homenaje de toda la sociedad”, enfatizó el presidente del PP, antes de reclamar de nuevo que se declare luto nacional hasta que se supere esta pandemia. También volvió a exigir que garantice material de protección a quienes luchan en primera línea contra el coronavirus y test masivos para la población.
Según Casado, casi “no queda un medio influyente internacional que no haya criticado la imprevisión y mala gestión de la crisis” del Ejecutivo y denunció el “desprecio” con el que se trata a una oposición que le sigue apoyando con la prórroga del estado de alarma. “Pero no seré yo el que le exija responsabilidades en medio de la tormenta, no hasta que amaine”, apostilló.
Eso sí, el líder de la oposición no renegó de decir lo que el PP considera que se debe hacer mejor, “aunque sólo sea porque estamos apoyando, sin ser ni siquiera consultados, las medidas más drásticas de la historia democrática de España”. Y más aún, añadió, “cuando hoy apoyaremos por tercera vez un estado de alarma que ya ha desbordado sobradamente su alcance constitucional”.
"EFICACIA Y TRANSPARENCIA"
En todo caso, Casado advirtió a Sánchez de que “esta restricción de derechos no es ilimitada” y recalcó que “los poderes máximos que le otorgamos deben ir acompañados de eficacia y de transparencia”. “Una cosa es contener la expansión de la pandemia y otra muy diferente es confinar la democracia, las libertades constitucionales e incluso las legítimas críticas de la oposición, los medios de comunicación o los propios ciudadanos en las redes sociales”, incidió.
A pesar de que “ésta ha sido la crónica de una pandemia anunciada”, Casado aseguró que su “lealtad a los españoles” no se resentirá. No obstante, rememoró las advertencias de la Organización Mundial de la Salud ya desde hace tres meses para criticar que a principios de marzo el Gobierno autorizase “centenares de manifestaciones, eventos deportivos y lúdicos” y “sólo en Madrid alentasen 77 manifestaciones multitudinarias por el 8 de marzo”.
"PEDIR PERDÓN"
En este contexto, preguntó a Sánchez si “de verdad mantiene que se ha hecho todo bien” y si “cree que este gobierno no tiene absolutamente nada de lo que arrepentirse”. “¿No va a pedir perdón a nadie?”, inquirió, dado que “se agradecería (por parte de Sánchez) menos discurso voluntarista y un poco de sensibilidad, humildad y sinceridad”.
A este respecto, y ante la falta de “autocrítica”, se quejó de que Sánchez justifique sus decisiones en “un supuesto comité de expertos del que nada conocemos”. Por ello, adelantó que cuando acabe la crisis pedirá las actas de esas reuniones en una comisión de investigación para saber “si hubo solo ocultación o también negligencia”.
“Le pido que nos diga la verdad, le cueste lo que le cueste”, insistió Casado cuando ya han pasado casi 30 días desde que el Gobierno adquiriese “las competencias excepcionales y el mando y la responsabilidad única” en la gestión de la crisis del coronavirus. “La verdad sobre esa rectificada desescalada, sobre las compras fallidas de material, sobre la necesidad de llevar mascarillas por la calle o no”, solicitó.
También urgió a Sánchez a decir “la verdad sobre la identidad del proveedor de test fraudulentos y sobre cómo pretende improvisar Arcas de Noé en medio del diluvio”. De igual modo, pidió explicaciones sobre el posible uso de datos personales en las aplicaciones informáticas y sobre el destino de impuestos para subvenciones a televisiones y “sobre las campañas de ‘fake news’ contra la gestión sanitaria del PP”.
En esta línea, le exigió decir “la verdad sobre el plan económico del vicepresidente (Pablo Iglesias) frente a la libertad empresarial y la propiedad privada”, así como “sobre sus previsiones reales de déficit y deuda pública y sobre la verdadera condicionalidad que tendría un rescate europeo”.
CIFRAS OFICIALES
“Y, sobre todo, díganos si es verdad que el número real de víctimas podría duplicar las cifras oficiales. Porque eso sería de extraordinaria gravedad”, agregó Casado, para a renglón seguido opinar que en esta crisis está funcionando mejor lo que “no depende” de Sánchez.
Hizo esta aseveración porque, a su juicio, “los españoles han cumplido con todo lo que les ha pedido”, pero Sánchez “no ha cumplido con ellos. A pesar de todo ello, prosiguió Casado, “seguimos apoyando al Gobierno para salvar vidas” aunque no para “arruinar a España”.
En palabras de Casado, “difícilmente puede aspirar a reescribir la Transición quien no es capaz ni de negociar un decreto”. “Pero no perdemos la esperanza de que algún día busque un pacto de verdad, y no un trampantojo para desviar el telediario de tantas malas cifras”, sostuvo.
De esta forma, el presidente de los populares consideró que “no parece sincera la repentina vocación pactista de quien no se ha dignado ni a llamar en dos semanas a quienes le está aprobando el confinamiento de toda la nación”. “No hay que tender cortinas de humo, ni renovar ningún acuerdo histórico que ya nos permitió convertirnos en una moderna democracia europea”, remachó.