Fue en el año 2020 cuando el Consorcio determinó la necesidad de adjudicar un contrato de obra para realizar diferentes mejoras en el depósito de rechazos de esta localidad abulense, puesto que en la primera fase, desarrollada en el año 2002, se incluyó únicamente la impermeabilización del vaso hasta la cota 94.
“Tal y como se ha ido constatado en las distintas reuniones mantenidas y visitas al centro, actualmente la fase I se encuentra al límite de su llenado, por lo que se considera de primera necesidad la adecuación de la siguiente fase del vertedero, mediante impermeabilización y redes de drenaje y recogida de lixiviados, para poder continuar con la correcta explotación del depósito”, explica el presidente del Consorcio, José Luis del Nogal.
La adjudicación del contrato de obras requiere la previa elaboración, supervisión, aprobación y replanteo del correspondiente proyecto que definirá con precisión las obras y medidas necesarias para el correcto acondicionamiento del depósito.