El Gobierno en funciones ha informado a las Comunidades Autónomas de que aplaza la implantación de la nueva prueba de acceso a la universidad.
El secretario de Estado de Educación, José Manuel Bar, y el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón, han trasladado también esta decisión al presidente y la secretaria general de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas.
Rebaja la incertidumbre de docentes y alumnos
El pasado mes de febrero, el Ministerio de Educación y Formación Profesional presentó el borrador de Real Decreto que regularía la prueba de acceso a la universidad; un modelo de implantación gradual que comenzaría a aplicarse en el curso 2023-2024 y que ahora se retrasará hasta la aprobación del Real Decreto por parte del nuevo Ejecutivo.
Esta decisión se debe a que la aprobación de la norma excedería las competencias de un Gobierno en funciones, generando confrontación con las Administraciones autonómicas.
Además, atiende a la petición de un año de moratoria por parte de las instancias universitarias y rebaja la incertidumbre de docentes, alumnos y familias.