El acto, convocado por UGT, CC.OO, C-SIF y distintos sindicatos policiales, pretendía en un principio reunir en la Plaza Madrid a los trabajadores de la administración general del Estado, empresas públicas, la Junta de Castilla y León o de la Policía, entre otras instituciones.
En la Plaza Madrid, punto de reunión de los participantes, varios portavoces de los sindicatos y CC.OO expresaron ante los medios de comunicación su rechazo hacia las decisiones tomadas por el Ejecutivo y afirmaron que la concentración representaba tan sólo el comienzo de las movilizaciones, cabiendo la posibilidad de que las protestas derivasen finalmente en una huelga general u otras actuaciones de naturaleza similar.
Posteriormente, entre consignas reivindicativas y de manera espontánea, los congregados iniciaron una marcha que prosiguió hasta Plaza España, donde la concurrencia permaneció durante unos veinte minutos, impidiendo así la normal circulación de los vehículos que transitaban por la vía. Antes de alcanzar su destino final frente al ayuntamiento de la ciudad, los manifestantes realizaron una pausa en su recorrido delante de la sede del Banco de España, en la calle Duque de la Victoria, y allí profirieron gritos de reprobación contra la entidad.
La eliminación de las pagas extras de Navidad, la supresión de los días de libre disposición por antigüedad o la reducción de número de días libres representan algunas de las medidas aprobadas el pasado viernes por el Consejo de Ministros en la Moncloa. Estos ajustes, junto con otros aplicados a diferentes sectores, pretenden la reducción del déficit mediante el ahorro de 65.000 millones de euros en las cuentas públicas.
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