Durante el acto de presentación pública de la Propuesta de la Agenda Digital Española, el ministro aseveró que el Secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, había ya dado una respuesta a la carta remitida al ministerio por los sindicatos de la minería y la patronal del carbón, Carbunión, en la que ambos consentían en la asimilación de un recorte del 63% de las ayudas asignadas al sector, a cambio de que fueran postergadas a ejercicios futuros.
El ministro argumentó que una retribución no resultaría factible puesto que se han aplicado medidas de ajuste en todos los sectores, y apuntaló cómo el sector turístico, que calificó como el más importante de la economía española, había sufrido una merma de 150 millones. Explicó, además, que en la situación actual sería inviable una compensación al alza, ya que no se dispone de fondos para ello, aludiendo acto seguido a la honestidad con que la administración debería informar en relación a esta materia.
El responsable del Gobierno recalcó la reciente rebaja de 500 millones en los Presupuestos Generales del Estado, que exige un ahorro de 55 millones para el ministerio de Industria; cantidad que deberá ser distribuida entre todos los sectores gestionados por el organismo.
La Junta de Castilla y León, por su parte, previene sobre la gravedad de la situación. El director general de Energía y Minas, Ricardo González Mantero, declaró recientemente la necesidad acuciante de apostar por el sector del carbón, advirtiendo que este podría llegar a hundirse si no se realiza el pago de los 111 millones que le fueron otorgados para este año, al margen de la compensación o no de las ayudas al sector.
Según Soria, independientemente de que se cuente con el beneplácito de patronal y sindicatos, la obligación actual del gobierno es centrarse en la negociación del plan 2013-2018, para que a partir de enero de 2013 exista un programa de prestación de ayudas que continúe con la concesión de subsidios la industria minera hasta 2018.