El impacto positivo del sistema de receta electrónica en el funcionamiento diario de la Atención Primaria de Sacyl ha supuesto, desde su puesta en marcha en 2016, una reducción en torno al 15% en el número de consultas para la emisión de recetas de medicamentos crónicos -en comparación con la situación previa a su implantación-, lo que se traduce en un descenso de aproximadamente 2,1 millones.