Las elevadas temperaturas propias del mes de julio y la importante sequía que sufre Ávila son dos factores que incrementan el peligro de incendio en el casco urbano durante el verano. Por ello, Sonsoles Sánchez-Reyes insta al alcalde de Ávila a acometer el desbroce de las parcelas vacías de titularidad pública y a ejercer sus competencias para que los propietarios de parcelas privadas que no albergan construcciones, cumplan, según la legislación vigente, con su obligación de mantener los solares limpios.